A bilingual (English and Spanish) storybook for children that tells about the adventures of Lulu, a little girl who wanted to be free from her parents and went on a fascinating journey that made her dream come true... or did it? Un libro biling?e (espa?ol e ingl?s) de cuentos para ni?os que narra las aventuras de Lul?, una ni?a que deseaba liberarse de sus padres e inici? un fascinante viaje que hizo que su sue?o se convirtiera en realidad... pero, en verdad lo logr?? Recuerdo que entr? y dando un gran portazo me sent? sobre el taburete frente a la ventana recargandomis codos sobre el alf?izar y mi barbilla sobre mis pu?os cerrados, tratando de contener las l?grimas. Qu? horrible iba a ser esa tarde! Observ? el patio a trav?s de la ventana, tratando de ver algo interesante, pero era el escenario conocido y aburrido de siempre. Aun los cinco ?rboles con sus troncos pintados de colores me parec?an tontos. Me sent?a muy enojada. C?mo quisiera ser libre!, dije entre dientes. Me gustar?a poder volar, irme muy lejos para que nadie me rega?e ni me castigue.
- De veras quisieras irte de aqu??-, escuch? que me dec?a una vocecita.
Me enderec? sorprendida y mir? a mi derredor. No hab?a nadie m?s en la habitaci?n.
Qu? boba soy! pens?, fue mi imaginaci?n. Volv? a tomar la posici?n anterior y mi ce?o volvi? a fruncirse.
-Te pregunt? si en verdad te gustar?a irte de aqu?
-volv? a escuchar que dec?a la vocecita.
Entonces me percat? de la presencia de una peque?a catarinita que caminaba muy cerca de uno de mis codos. Aunque me pareci? una locura, le pregunt?
- Fuiste t? quien me habl??
- Claro! -me contest?-, qui?n m?s podr?a ser?
-Pero, c?mo es posible que una . . .
- Que una catarinita pueda hablar? Pues ver?s, yo en realidad no soy una catarinita. Soy Alba, un hada a quien un ogro malo, por envidia, transform? en catarinita. Observ? que sobre la cabeza de Alba brillaba un peque??simo brillante azul.
- Qu? linda piedrita azul! -exclam?.
-Si quieres, puede ser tuya. Ella te va a permitir hacer muchas cosas maravillosas. Podr?s lograr lo que tanto anhelas: tu libertad. Y tambi?n con ella tendr?s el poder de transformarte en cualquier animal o cosa que quieras. Pero siempre debes tenerla contigo.
- En verdad podr? hacer todas esas cosas? Podr? irme de aqu? ahora mismo?
-S?. Yo misma la he usado y he podido convertirme en lo que he deseado, menos nuevamente en la forma de hada. Pero recuerda mantener contigo la piedra todo el tiempo, y desea con todo tu coraz?n lo que quieras ser.
Tom? la piedrita en la mano y poni?ndola sobre mi cabeza cerr? los ojos. Quisiera ser una mariposa, pens?. De pronto me sent? muy ligera. Abr? los ojos y vi que en lugar de brazos ten?a unas hermosas alas de varios colores, casi transparentes. Todo a mi alrededor parec?a enorme. Agit? las alas y comenc? a volar por la habitaci?n y luego, pasando por entre los barrotes de la ventana, vol? al exterior 2
Qu? feliz me sent?a! Vol? sobre unos arbustos y llegu? hasta un macizo de fl ores. Me pos? sobre una de ellas.
Luego escuch? risas y unas voces alegres, y me di cuenta que muy cerca hab?a algunas mariposas volando tambi?n.
- Hola, compa?era! -me saludaron con alegr?a.
- Hola! -les contest? con algo de timidez.
- Ven con nosotras! - me invitaron. Vamos a otros jardines donde hay fl ores m?s hermosas.
Las segu?, volando por varias cuadras y probando el sabor de diferentes flores. Llegamos a un gran parque. Hab?a muchos ni?os. Vi que uno de los muchachos tra?a una red en las manos y comenz? a perseguirnos a mis compa?eras y a m?. Muy asustadas, tratamos de huir. Tal vez por mi falta de pr?ctica para volar, me qued? un poco atr?s de mis compa?eras y de pronto me vi atrapada entre la red del muchacho. ?l brinc? de gusto. Con
- De veras quisieras irte de aqu??-, escuch? que me dec?a una vocecita.
Me enderec? sorprendida y mir? a mi derredor. No hab?a nadie m?s en la habitaci?n.
Qu? boba soy! pens?, fue mi imaginaci?n. Volv? a tomar la posici?n anterior y mi ce?o volvi? a fruncirse.
-Te pregunt? si en verdad te gustar?a irte de aqu?
-volv? a escuchar que dec?a la vocecita.
Entonces me percat? de la presencia de una peque?a catarinita que caminaba muy cerca de uno de mis codos. Aunque me pareci? una locura, le pregunt?
- Fuiste t? quien me habl??
- Claro! -me contest?-, qui?n m?s podr?a ser?
-Pero, c?mo es posible que una . . .
- Que una catarinita pueda hablar? Pues ver?s, yo en realidad no soy una catarinita. Soy Alba, un hada a quien un ogro malo, por envidia, transform? en catarinita. Observ? que sobre la cabeza de Alba brillaba un peque??simo brillante azul.
- Qu? linda piedrita azul! -exclam?.
-Si quieres, puede ser tuya. Ella te va a permitir hacer muchas cosas maravillosas. Podr?s lograr lo que tanto anhelas: tu libertad. Y tambi?n con ella tendr?s el poder de transformarte en cualquier animal o cosa que quieras. Pero siempre debes tenerla contigo.
- En verdad podr? hacer todas esas cosas? Podr? irme de aqu? ahora mismo?
-S?. Yo misma la he usado y he podido convertirme en lo que he deseado, menos nuevamente en la forma de hada. Pero recuerda mantener contigo la piedra todo el tiempo, y desea con todo tu coraz?n lo que quieras ser.
Tom? la piedrita en la mano y poni?ndola sobre mi cabeza cerr? los ojos. Quisiera ser una mariposa, pens?. De pronto me sent? muy ligera. Abr? los ojos y vi que en lugar de brazos ten?a unas hermosas alas de varios colores, casi transparentes. Todo a mi alrededor parec?a enorme. Agit? las alas y comenc? a volar por la habitaci?n y luego, pasando por entre los barrotes de la ventana, vol? al exterior 2
Qu? feliz me sent?a! Vol? sobre unos arbustos y llegu? hasta un macizo de fl ores. Me pos? sobre una de ellas.
Luego escuch? risas y unas voces alegres, y me di cuenta que muy cerca hab?a algunas mariposas volando tambi?n.
- Hola, compa?era! -me saludaron con alegr?a.
- Hola! -les contest? con algo de timidez.
- Ven con nosotras! - me invitaron. Vamos a otros jardines donde hay fl ores m?s hermosas.
Las segu?, volando por varias cuadras y probando el sabor de diferentes flores. Llegamos a un gran parque. Hab?a muchos ni?os. Vi que uno de los muchachos tra?a una red en las manos y comenz? a perseguirnos a mis compa?eras y a m?. Muy asustadas, tratamos de huir. Tal vez por mi falta de pr?ctica para volar, me qued? un poco atr?s de mis compa?eras y de pronto me vi atrapada entre la red del muchacho. ?l brinc? de gusto. Con
| Author: Adelina Almanza |
| Publisher: Xlibris |
| Publication Date: Apr 09, 2010 |
| Number of Pages: 40 pages |
| Binding: Paperback or Softback |
| ISBN-10: 1450055192 |
| ISBN-13: 9781450055192 |