Createspace Independent Publishing Platform
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Maximiliano De Habsburgo: La Vida Del Emperador Europeo De Mexico (Spanish Edition)
Product Code:
9781535344517
ISBN13:
9781535344517
Condition:
New
$10.84
Hab?a una vez, cuando la guerra civil amenazaba separar a Estados Unidos, una monarqu?a al sur del R?o Bravo. El reino se llamaba M?xico. Hab?a un castillo, una princesa y un joven pr?ncipe alto y barbado; era noble e idealista, ten?a fuego en el coraz?n, pero tambi?n era d?bil y cr?dulo. Necio, dec?an algunos. Un d?a, cuando todav?a era adolescente, escribi?: "La ambici?n es como el aeronauta. Hasta cierto punto la ascensi?n es agradable y hace gozar de una vista espl?ndida y de un panorama inmenso. Pero cuando se sube m?s, sobreviene el v?rtigo, el aire se enrarece y crece el riesgo de una gran ca?da". Con esa par?bola, el pr?ncipe austriaco Maximiliano de Habsburgo plasm? sin darse cuenta el destino hacia el que cabalg? valiente, a pesar de las advertencias... y de los aduladores. En todo caso, sigui? lo que su coraz?n le indicaba. Y Carlota, la princesa, era por su parte "una de las m?s cultas y bellas" de toda Europa. Desde ni?a sab?a que un d?a se convertir?a en reina, o emperatriz. Cuando les hablaron por primera vez de ofrecerles la corona de M?xico, ella ten?a 22 a?os y ?l 28, y estaban cercados por las intrigas y ambiciones de sus hermanos. Todos ten?an prisa de quitarlos del camino. Por eso, cuando un par de a?os m?s tarde la pareja recibi? a una comisi?n diplom?tica oficial donde les aseguraron que M?xico requer?a su presencia, fue como un cuento de hadas hecho realidad. En la imaginaci?n de la ?poca, el lejano pa?s era el para?so que hab?a descrito el gran ge?grafo Alexander von Humboldt, con sus espesas selvas y bosques, volcanes humeantes, riqu?simas minas de oro y plata, playas infinitas y p?jaros ex?ticos. "El punto de vista m?s peligroso, es el punto de vista de quien no ha visto el mundo", escribi? el explorador pruso, y Max lo crey? y lo vio con los ojos de su alma. Pero en M?xico la realidad era distinta a la imaginaci?n. Tarde se dieron cuenta de que hab?an ca?do bajo la seducci?n de las sirenas, especialmente una que estaba sentada en el trono de Francia, Napole?n III. El ambicioso emperador ve?a con disgusto la expansi?n de los Estados Unidos, del protestantismo y de la raza anglosajona en Am?rica.Claro, tambi?n estaban los grandes territorios del norte de M?xico, llenos de minas de oro, y la vaga idea de reconstruir la raza y la cultura latina en el Nuevo Mundo. Para eso, atrajo a dos marionetas a su escenario, Maximiliano y Carlota, a quienes se asegur? de que les dijeran que el pueblo mexicano les tender?a una alfombra de rosas a su llegada. En sus sue?os, Max y Carlota se convert?an en los salvadores del antiguo imperio de Moctezuma, incapaz de gobernarse a s? mismo, a punto de la autodestrucci?n. Pero Maximiliano no pensaba en la conquista ni el saqueo, como su antepasado el rey Carlos I de Espa?a, sino en la recomposici?n del pa?s. Tampoco es que haya pecado de arrogancia. La idea de enviar un monarca europeo a una naci?n americana parece indignante hoy en d?a, pero en ese tiempo era com?n que los reyes de Inglaterra, B?lgica, Grecia o Bulgaria fueran de otras nacionalidades. Aun as?, Maximiliano rehus? aceptar el trono de M?xico hasta que le mostraran pruebas de que los mexicanos estaban de acuerdo. Cuando le ense?aron un supuesto plebiscito, consinti? en la peligrosa aventura. La tragedia de Maximiliano y Carlota fue rom?ntica y pol?tica. Para la historia oficial, la que escribieron los ganadores, son una afrenta a la independencia y s?mbolo de la arrogancia europea. Para las monarqu?as de Europa, son un recuerdo triste y vergonzosos, por el abandono, las artima?as y la traici?n que echaron sobre sus cabezas. El arrepentimiento lleg? demasiado tarde. Los dos ya estaban muertos. Uno enterrado en su tumba; ella v?ctima de la locura. Es algo que Shakespeare pudo haber escrito. De ah? que su vida haya sido contada tantas veces no s?lo por historiadores, sino tambi?n por dramaturgos, cineastas y novelistas.
Author: Gustavo Vazquez Lozano|Charles River Editors |
Publisher: CreateSpace Independent Publishing Platform |
Publication Date: Jul 18, 2016 |
Number of Pages: 56 pages |
Language: Spanish |
Binding: Paperback |
ISBN-10: 1535344512 |
ISBN-13: 9781535344517 |
Maximiliano De Habsburgo: La Vida Del Emperador Europeo De Mexico (Spanish Edition)
$10.84
Hab?a una vez, cuando la guerra civil amenazaba separar a Estados Unidos, una monarqu?a al sur del R?o Bravo. El reino se llamaba M?xico. Hab?a un castillo, una princesa y un joven pr?ncipe alto y barbado; era noble e idealista, ten?a fuego en el coraz?n, pero tambi?n era d?bil y cr?dulo. Necio, dec?an algunos. Un d?a, cuando todav?a era adolescente, escribi?: "La ambici?n es como el aeronauta. Hasta cierto punto la ascensi?n es agradable y hace gozar de una vista espl?ndida y de un panorama inmenso. Pero cuando se sube m?s, sobreviene el v?rtigo, el aire se enrarece y crece el riesgo de una gran ca?da". Con esa par?bola, el pr?ncipe austriaco Maximiliano de Habsburgo plasm? sin darse cuenta el destino hacia el que cabalg? valiente, a pesar de las advertencias... y de los aduladores. En todo caso, sigui? lo que su coraz?n le indicaba. Y Carlota, la princesa, era por su parte "una de las m?s cultas y bellas" de toda Europa. Desde ni?a sab?a que un d?a se convertir?a en reina, o emperatriz. Cuando les hablaron por primera vez de ofrecerles la corona de M?xico, ella ten?a 22 a?os y ?l 28, y estaban cercados por las intrigas y ambiciones de sus hermanos. Todos ten?an prisa de quitarlos del camino. Por eso, cuando un par de a?os m?s tarde la pareja recibi? a una comisi?n diplom?tica oficial donde les aseguraron que M?xico requer?a su presencia, fue como un cuento de hadas hecho realidad. En la imaginaci?n de la ?poca, el lejano pa?s era el para?so que hab?a descrito el gran ge?grafo Alexander von Humboldt, con sus espesas selvas y bosques, volcanes humeantes, riqu?simas minas de oro y plata, playas infinitas y p?jaros ex?ticos. "El punto de vista m?s peligroso, es el punto de vista de quien no ha visto el mundo", escribi? el explorador pruso, y Max lo crey? y lo vio con los ojos de su alma. Pero en M?xico la realidad era distinta a la imaginaci?n. Tarde se dieron cuenta de que hab?an ca?do bajo la seducci?n de las sirenas, especialmente una que estaba sentada en el trono de Francia, Napole?n III. El ambicioso emperador ve?a con disgusto la expansi?n de los Estados Unidos, del protestantismo y de la raza anglosajona en Am?rica.Claro, tambi?n estaban los grandes territorios del norte de M?xico, llenos de minas de oro, y la vaga idea de reconstruir la raza y la cultura latina en el Nuevo Mundo. Para eso, atrajo a dos marionetas a su escenario, Maximiliano y Carlota, a quienes se asegur? de que les dijeran que el pueblo mexicano les tender?a una alfombra de rosas a su llegada. En sus sue?os, Max y Carlota se convert?an en los salvadores del antiguo imperio de Moctezuma, incapaz de gobernarse a s? mismo, a punto de la autodestrucci?n. Pero Maximiliano no pensaba en la conquista ni el saqueo, como su antepasado el rey Carlos I de Espa?a, sino en la recomposici?n del pa?s. Tampoco es que haya pecado de arrogancia. La idea de enviar un monarca europeo a una naci?n americana parece indignante hoy en d?a, pero en ese tiempo era com?n que los reyes de Inglaterra, B?lgica, Grecia o Bulgaria fueran de otras nacionalidades. Aun as?, Maximiliano rehus? aceptar el trono de M?xico hasta que le mostraran pruebas de que los mexicanos estaban de acuerdo. Cuando le ense?aron un supuesto plebiscito, consinti? en la peligrosa aventura. La tragedia de Maximiliano y Carlota fue rom?ntica y pol?tica. Para la historia oficial, la que escribieron los ganadores, son una afrenta a la independencia y s?mbolo de la arrogancia europea. Para las monarqu?as de Europa, son un recuerdo triste y vergonzosos, por el abandono, las artima?as y la traici?n que echaron sobre sus cabezas. El arrepentimiento lleg? demasiado tarde. Los dos ya estaban muertos. Uno enterrado en su tumba; ella v?ctima de la locura. Es algo que Shakespeare pudo haber escrito. De ah? que su vida haya sido contada tantas veces no s?lo por historiadores, sino tambi?n por dramaturgos, cineastas y novelistas.
Author: Gustavo Vazquez Lozano|Charles River Editors |
Publisher: CreateSpace Independent Publishing Platform |
Publication Date: Jul 18, 2016 |
Number of Pages: 56 pages |
Language: Spanish |
Binding: Paperback |
ISBN-10: 1535344512 |
ISBN-13: 9781535344517 |