El Jebel-es-Zubleh es una monta?a de m?s de cincuenta millas de longitud y tan estrecha que su dibujo en el mapa se parece a una oruga reptando de sur a norte. De pie sobre sus pe?ascos pintados de rojo y blanco, s?lo se ve el desierto de Arabia, que los vientos del este, tan odiados por los cultivadores de vides, se han reservado como terreno de juego desde el principio de los tiempos. El pie de dichos montes est? bien cubierto de arenas arrastradas por el ?ufrates y depositadas all?, porque la monta?a constituye un muro protector de los campos de Boab y de Amm?n, al oeste, que de otro modo formar?an parte del desierto. El ?rabe ha dejado el sello de su lengua en todo lo que se encuentra al sur y al este de Judea; de modo que, en su idioma, el viejo Jebel es el padre de innumerables wadis que, cortando la v?a romana (vaga sombra de lo que fue en otro tiempo, polvoriento sendero recorrido hoy por los peregrinos que van y vienen de La Meca), imprimen sus surcos, profundizando a medida que avanzan, para llevar las avenidas de la estaci?n lluviosa al Jord?n, o a su ?ltimo recept?culo, el mar Muerto. De uno de aquellos barrancos (o, m?s concretamente, del que corre por el extremo del Jebel y, extendi?ndose del este hacia el norte, acaba por constituir el lecho del r?o Jabbok) sal?a un viajero que se dirig?a hacia las altiplanicies del desierto.
Author: Lewis Wallace |
Publisher: Culturea |
Publication Date: 45039 |
Number of Pages: 260 pages |
Binding: Fiction |
ISBN-10: |
ISBN-13: 9791041936076 |