Damas: El valor de una mujer

Cuando hablo de que he encontrado a "alguien" que me ha ense?ado, que me ha dado amor, o lo que sea, la mayor?a de las ocasiones me refiero a m? misma. A lo largo de mi vida, sobre todo desde hace unos cuatro a?os, algo en mi comenz? a cambiar. Si quer?a libertad deb?a luchar por ella, y joder, yo quer?a ser libre.
Durante ese tiempo aprend? a quererme, a no culparme por todo, a hablar conmigo, a o?rme, a sentirme, en fin, aprend? a amarme. Me volv? m?s espiritual, y creo que tambi?n, m?s sensible. La mayor?a de estas letras, las escrib? cuando a?n estaba en busca de esa libertad, no pretend?a que me crecieran alas para poder volar, que hubiese estado bien, pero encontr? que todas las respuestas se encontraban en alg?n lugar en mi interior, y supe que la libertad, al final, es aprender a amarte a ti misma. Te respetas, te cuidas, te importas, y todo lo que te sucede, te escuchas con atenci?n. Es como abrazarte a ti misma y sentir que todo un universo envuelve tu cuerpo de calidez. Algo como eso, y poco a poco te das cuenta de que eso es libertad. Una vez que te amas a ti misma ya lo dem?s pasa a un segundo o tercer lugar y otras cosas, simplemente pasan, te son indiferentes. Porque has aprendido a valorarte y a valorar lo realmente importante.