"En 1938... el protagonista n?mero uno de las noticias del a?o no fue FDR, Hitler o Mussolini. Tampoco fueron Lou Gehrig o Clark Gable. El tema de la mayor cantidad de cent?metros de columna en los peri?dicos en 1938 ni siquiera era una persona. Era un caballo de carreras de tama?o peque?o y patas torcidas llamado Seabiscuit". - Laura Hillenbrand, Seabiscuit: una leyenda americana
De todas las cosas que una naci?n, o incluso un individuo, necesita para sobrevivir a una crisis, quiz? ninguna sea tan necesaria como la esperanza. Esa sensaci?n de que de alguna manera uno puede sobrevivir, incluso ganar, aunque las probabilidades est?n en contra y el panorama sea sombr?o. A lo largo de su historia, Estados Unidos ha sido bendecido, a menudo cuando m?s lo necesitaba, con esperanza proveniente de un lugar extra?o. En 1778 lleg? cuando los franceses se unieron a la Revoluci?n Americana, y en 1980, el equipo de hockey masculino se lo llev? a casa con el oro ol?mpico. Pero a finales de la d?cada de 1930, durante la Gran Depresi?n, lleg? en forma de un caballo llamado Seabiscuit.
Los estadounidenses siempre han amado a los animales, y quienes vivieron antes de la Segunda Guerra Mundial todav?a estaban lo suficientemente cerca de sus ra?ces pioneras como para sentir un afecto especial por los caballos. Despu?s de todo, eran estos nobles animales los que llevaban a los soldados y tiraban de los arados y de los carros de leche por igual. Un caballo era m?s que una simple mascota; era un compa?ero en la lucha por la supervivencia. As? como muchos estadounidenses hab?an conocido a individuos especiales e inolvidables, tambi?n hab?an conocido caballos especiales.
Seabiscuit fue uno de ellos, e incluso el nombre del animal lleg? al coraz?n de quienes luchaban. Una galleta de mar era un trozo de pan horneado durante tanto tiempo en un horno tan bajo que quedaba completamente seco y nunca se enmohec?a. Era tan duro que hab?a que remojarlo en agua, a veces incluso en agua de lluvia, antes de poder comerlo. Pero era nutritivo y permitir?a al marinero cumplir con su deber durante una hora m?s, ayud?ndolo a mantenerse con vida hasta que llegara a puerto seguro.
Seabiscuit se parec?a en muchos aspectos a su tocayo, porque se cultiv? en muchas razas peque?as hasta que estuvo listo para la gran liga. Tambi?n estaba en su mejor momento cuando estaba empapado del afecto y la atenci?n que le brindaban sus due?os, entrenador y jinetes. Por encima de todo, sus victorias e incluso sus derrotas alimentaron a una naci?n desesperada e inspiraron a sus ciudadanos a seguir adelante hasta alcanzar un puerto m?s seguro de estabilidad financiera. Tambi?n era un amigo, un l?der inspirador que estar?a al nivel de hombres como Roosevelt y Churchill en popularidad y respeto. Es posible, tal vez incluso probable, que si hubiera nacido en otro lugar y ?poca, su nombre nunca hubiera sido conocido fuera del mundo de las carreras, pero como cuenta una historia de Horatio Alger que atrajo a una naci?n llena de ellos, su nombre se convirti? en un palabra familiar y ayud? a asegurarle un legado como quiz?s el caballo m?s famoso de la historia.
Seabiscuit: La vida del caballo m?s famoso de la historia de Estados Unidos analiza la vida y carrera del famoso pura sangre. Junto con fotograf?as de personas, lugares y eventos importantes, aprender? sobre Seabiscuit como nunca antes, en muy poco tiempo.
Author: Charles River |
Publisher: Independently Published |
Publication Date: Aug 21, 2024 |
Number of Pages: 38 pages |
Binding: Paperback or Softback |
ISBN-10: NA |
ISBN-13: 9798336560732 |